
AÑADA CLIMATOLÓGICA
El invierno fue frío, con ausencia de lluvias y la primavera, lluviosa y fría.
El inicio del ciclo fue tardío, con un retraso de unos 10 días, pero el calor en los meses de mayo y junio hizo que al final se adelantara. El verano fue muy caluroso, con ausencia total de lluvias, llegando a registrar la temperatura más alta por nuestra estación, 41,5ºC el 16 de julio.
A pesar de la sequía y el calor, sorprende la frescura de los vinos.
Precipitación: 253,6mm. Integral térmica: 1859,05 grados-día.
Zona de producción:
D.O. Ribera del Duero
Variedades:
100% Tinta del País (Tempranillo)
Viñas:
Pequeñas parcelas en La Horra, Roa y pueblos colindantes (Burgos). Cepas en vaso.
Edad:
Viñas de 25 a 30 años de media
Vendimia:
Manual con mesa de selección
Elaboración:
Fermentación alcohólica espontánea en depósito de acero inoxidable, fermentación maloláctica en tinas de roble francés.
Crianza:
14 meses en barrica, 80% roble francés y 20% roble americano.
Estabilización:
Por métodos naturales
Clarificación:
Albúmina de huevo.
Grado alcohólico:
14,5% Vol.
Presentación:
Caja de cartón de 6 botellas
Formato:
Botellas de 50 cl, 75 cl, 1,5 l, 3 l y 6 l
Color:
Capa media alta de color rojo brillante y ribete rojo.
Nariz:
Es muy intenso, de fruta roja madura y fresca. Con la madera impecablemente ensamblada. Sorprende la frescura en una añada tan cálida como la 2022, pero esta peculiaridad la estamos viendo con frecuencia. En este caso, es un vino muy directo, pero no por eso es sencillo. La fruta es completa y hay diferentes capas de hierbas aromáticas y minerales.
Boca:
El volumen es medio-alto, con mucha fruta roja, en la gama de las cerezas y destellos negros que recuerdan a las moras. No hay rastro de la madera de la crianza porque sobresale por encima de todo la fruta y la frescura. El tanino es muy bueno, está bien pulido, aunque está presente. El vino está riquísimo, con gran longitud en boca y muy placentero. Un vino que encantará.


